Dolor de espalda: causas, tratamiento, recomendaciones, fisioterapia para el dolor de espalda
Los dolores de espalda son mucho más comunes de lo que creemos, afectando a casi toda la población al menos 1 vez en la vida
Tipos de dolor de espalda según la zona
El dolor de espalda puede clasificarse de muchas formas, pero la más común es la clasificación según la zona en la que nos duela: .
- Cervicalgia. Dolor de espalda localizado en la zona cervical, es decir en el cuello
- Dorsalgia. Dolor de espalda localizado en la zona media de la espalda, entre las escápulas, etc.
- Lumbalgia. Dolor de espalda localizado en la zona baja de la espalda y sacro. Comúnmente llamado: lumbago, ciática, etc. Luego pasaremos a explicar todos esos términos.
¿Por qué me duele la espalda?
Las causas de los diferentes dolores de espalda son múltiples, pero de manera general, hablaremos de los diferentes dolores y las causas más comunes de los mismos
- Cervicalgia. Las cervicalgias o dolor de cuello suelen tener lugar por: contracturas o sobrecargas musculares (las más comunes), artrosis (muy típica en gente mayor >65 años), estenosis cervical (estrechamiento del canal espinal del cuello, muy raro), lesiones ligamentosas, problemas en la mandíbula.
- Dorsalgia. La dorsalgia o el dolor en la zona media de la espalda suele tener lugar por: malas posturas en el trabajo o en tu día a día (lo más común), escoliosis o cifosis
- Lumbalgia. El dolor lumbar es el más común de los dolores de espalda. Este suele tener lugar por: causas musculares o distensiones ligamentosas (lo más común), hernia lumbar (puede causar ciática), artrosis (común en gente mayor).
- Dolores musculares causados por el COVID-19. Cada vez son más los casos de gente que reporta dolor de espalda causado por el covid o por la vacuna. Este dolor suele ser muscular y reversible (cede a los pocos días o semanas)
Lumbago y ciática
El lumbago es el nombre que se utiliza de manera común para denominar a la lumbalgia, que engloba todas las patologías que cursen con dolor en la zona lumbar o zona baja de la espalda.
En cuanto a la ciática, esta se relaciona con un dolor en la zona lumbar que irradia hacia la pierna y a veces llega hasta el pie. Muchas veces asociado a síntomas eléctricos (dolor tipo calambrazo). La ciática puede ser causada por:
- Músculo piramidal. También llamada falsa ciática.
- Hernia lumbar con compromiso del nervio ciático.
- Calor local. Manta térmica, bolsita de semillas. 15 minutos 2-3 veces al día en momentos agudos.
- Estiramientos. Realizaremos estiramientos suaves de: piramidal, cuadrado lumbar, isquiotibiales, dorsal ancho.
- Ejercicio regular. Una vez cese el dolor, lo ideal es realizar ejercicio de forma regular para reducir y mantener ese dolor de espalda. Las recomendaciones más comunes son: pilates o yoga terapéutico, natación, ejercicio dirigido.
¿Cómo quitar el dolor de espalda?
En primer lugar, es muy importante ser capaces de saber la causa del mismo, si es muscular, articular o visceral. Para ello, lo más común es realizar una prueba de imagen (resonancia magnética o radiografía), y así poder diferenciar el origen del dolor.
- Dolor de origen muscular. En la radiografía no se verá nada, aparecerá la columna normal. En Este caso, lo ideal es acudir a un fisioterapeuta. Lo más normal es que utilice con nosotros diferentes técnicas como son: terapia manual, estiramientos, punción seca y ejercicios. Además, seguramente nos recomiende una rutina de ejercicios y recomendaciones para casa.
- Dolor articular. En este caso, seguramente la cause esté en alguna vértebra en la columna. Dependiendo de lo que sea, a veces es necesario no solo realizar una radiografía si no también una resonancia magnética confirmatoria. En este caso, seguramente tengamos que acudir a un traumatólogo y un médico rehabilitador. Una vez decidido el abordaje, de nuevo es muy posible que nos recomienden acudir a un fisioterapeuta. En este caso, lo más importante es el ejercicio terapéutico.
- Dolor visceral. Hay algunas vísceras que dan dolor referido en la espalda, como por ejemplo el útero, los riñones, etc. En este caso, seguramente sean necesarias más pruebas para diagnosticar el origen del dolor (análisis de sangre, orina, etc.). Aquí, la figura clave será nuestro médico de cabecera y más adelante el especialista correspondiente.
De manera general, sea cual sea el origen del dolor, nuestra recomendación es clara: tener una vida activa, una dieta equilibrada y reducir el exceso de peso. En general, si tenemos un buen tono muscular y un peso adecuado, reduciremos muchísimo el impacto sobre nuestra columna y por lo tanto prevendremos tener dolor de espalda en un futuro.