Burnout en el trabajo
Un estudio llevado a cabo en 2018 por la consultora Randstad reveló que aproximadamente el 40% de los trabajadores en España manifestaban síntomas de burnout. Otro estudio realizado por el Instituto Nacional de Seguridad e Higiene en el Trabajo (INSHT) en 2019 encontró que el 22% de los trabajadores españoles padecían niveles altos de agotamiento emocional relacionado con su trabajo.
¿Qué sectores están más afectados por el burnout?
El estrés y el burnout pueden estar presentes en diferentes sectores laborales, pero algunos de ellos tienden a tener mayores niveles de estrés y riesgo de burnout. Aquí hay algunos sectores que a menudo se consideran más propensos al estrés laboral y al burnout:
- Profesionales de la salud: Médicos, enfermeros, personal de emergencias y otros trabajadores de la salud a menudo experimentan altos niveles de estrés debido a la carga de trabajo, la presión por salvar vidas, la exposición a situaciones traumáticas y la responsabilidad de tomar decisiones críticas.
- Trabajadores de l: Profesionales que trabajan en servicios sociales, como trabajadores sociales, psicólogos o terapeutas, pueden enfrentar una carga emocional intensa al lidiar con situaciones difíciles, casos de abuso, pobreza o violencia.
- Profesionales de la educación: Maestros y profesores se enfrentan a una presión considerable debido a la responsabilidad de educar, apoyar y cuidar a sus alumnos. Altas cargas de trabajo, demandas administrativas y la falta de recursos también pueden contribuir al estrés y al burnout.
- Sector de servicios: Trabajadores en industrias de servicios, como la hostelería, el comercio minorista y el turismo, pueden experimentar estrés debido a la atención al cliente, las largas horas de trabajo, la presión por alcanzar objetivos y el trato con situaciones difíciles o clientes exigentes.
- Profesionales corporativos: Ejecutivos, gerentes y otros profesionales en entornos corporativos a menudo enfrentan altas demandas de trabajo, plazos ajustados, largas jornadas laborales y una cultura de competitividad. La presión por rendir y cumplir con objetivos puede contribuir al estrés y al burnout.
¿En qué consiste el burnout?
El burnout laboral es como un «agotamiento extremo» que experimentas cuando estás sometido a presiones constantes y situaciones laborales estresantes prolongadas. En ese momento, empiezas a sentir que ya no puedes más, que tus energías se han agotado por completo.
Imagínate que estás trabajando mucho, enfrentando presiones constantes, sin motivación y como si no pudieras dar lo mejor de ti. Empiezas a sentirte agotado tanto física como emocionalmente, y te resulta difícil concentrarte en tus tareas. Incluso puedes volverte más negativo y cínico hacia tu trabajo.
El burnout laboral no solo afecta tu desempeño en el trabajo, sino también tu bienestar personal. Puedes experimentar cambios en tu estado de ánimo, tener dificultad para dormir, sentirte irritable y ansioso, e incluso caer en la tristeza o depresión.
Es importante tomar en serio el burnout laboral, ya que puede tener un impacto significativo en tu salud y calidad de vida. Si te sientes así, es recomendable buscar ayuda y tratar de encontrar formas de equilibrar tu vida laboral con actividades de relajación y autocuidado.
¿Cuáles son los síntomas del burnout?
Los síntomas del burnout laboral pueden variar de una persona a otra, pero hay una serie de síntomas comunes que se pueden observar:
- Agotamiento físico y emocional: Te sientes constantemente cansado(a) y sin energía, incluso después de descansar. El agotamiento puede afectar tanto tu cuerpo como tu mente.
- Disminución del rendimiento laboral: Experimentas una disminución en tu capacidad para desempeñarte eficientemente en tu trabajo. Puedes tener dificultad para concentrarte, tomar decisiones o completar tareas de manera efectiva.
- Desapego emocional: Sientes una actitud negativa y distante hacia tu trabajo. Puedes experimentar sentimientos de cinismo, apatía e indiferencia hacia tus responsabilidades laborales.
- Dificultades emocionales: Puedes experimentar cambios en tu estado de ánimo, como irritabilidad, ansiedad o tristeza. También puedes sentir una falta general de satisfacción y alegría en relación con tu trabajo.
- Problemas de sueño: Tienes dificultades para conciliar el sueño, te despiertas frecuentemente durante la noche o no puedes descansar adecuadamente, incluso cuando estás agotado.
- Problemas de salud física: El burnout laboral puede manifestarse a través de síntomas físicos, como dolores de cabeza, dolores musculares, problemas gastrointestinales y un sistema inmunológico debilitado.
Es importante tener en cuenta que estos síntomas pueden estar relacionados con otras condiciones médicas o situaciones personales, por lo que es fundamental buscar una evaluación adecuada por parte de un profesional de la salud para un diagnóstico preciso.
¿Cómo puedo evitar tener burnout?
Para prevenir o manejar el burnout laboral, te dejamos algunas estrategias que puedes llevar a cabo:
- Establece límites claros: Define límites entre tu trabajo y tu vida personal. Evita llevar trabajo a casa o dedicar todo tu tiempo libre a asuntos laborales. Permítete tiempo para descansar y participar en actividades que disfrutes.
- Practica el autocuidado: Dedica tiempo regularmente a cuidar de ti mismo(a). Esto puede incluir actividades como ejercicio físico, meditación, hobbies, tiempo con amigos y familia, o cualquier actividad que te relaje y te ayude a recargar energías.
- Aprende a decir «no»: No te sobrecargues con más tareas y responsabilidades de las que puedes manejar. Aprende a establecer límites y decir «no» cuando sea necesario. Prioriza tus tareas y aprende a delegar o pedir ayuda cuando sea posible.
- Busca apoyo y conexión social: Mantén una red de apoyo sólida. Habla con colegas, amigos o familiares sobre tus experiencias laborales y cómo te sientes. Compartir tus preocupaciones y emociones puede aliviar la carga y brindarte perspectivas y consejos útiles.
- Organiza y planifica: Organiza tu tiempo y tareas de manera efectiva. Establece metas realistas y divide las grandes tareas en partes más pequeñas y manejables. Esto puede ayudarte a sentirte más controlado(a) y a reducir el estrés.
- Practica técnicas de manejo del estrés: Aprende y utiliza técnicas de relajación como la respiración profunda, la visualización, el yoga o la práctica de mindfulness. Estas prácticas pueden ayudarte a reducir el estrés y a mantener la calma en momentos difíciles.
- Busca un equilibrio: Trata de encontrar un equilibrio entre el trabajo y otras áreas importantes de tu vida, como la familia, los amigos, los pasatiempos y el tiempo para ti mismo(a). Prioriza tus necesidades y busca actividades que te den placer y satisfacción fuera del trabajo.
Si sientes que el burnout laboral está afectando significativamente tu bienestar y funcionamiento, considera buscar ayuda profesional. Un psicólogo especializado en trabajo y empresas puede ser una ayuda fundamental.