Por qué mi bebé regurgita
Hacer que tu bebé expulse los gases es esencial para ayudarlo a eliminar el exceso de aire y calmar su estómago, lo que lo hace sentir más cómodo y feliz después de comer. Aquí tienes una guía práctica para entender y manejar los eructos y regurgitaciones en los bebés:
- El propósito de los eructos: Los bebés emiten eructos para liberar el aire que tragan durante la alimentación, lo que les ayuda a evitar la incomodidad causada por los gases en sus estómagos en desarrollo.
- Posiciones eficaces para hacer eructar: Hay varias formas de asistir a tu bebé para que eructe, incluyendo sostenerlo sobre tu hombro, acostarlo boca abajo sobre tu regazo o sentarlo sobre tu regazo inclinándolo hacia adelante. Estas posiciones facilitan la liberación del gas atrapado en su sistema digestivo.
- Diferencia entre regurgitar y vomitar: Es común que los bebés regurgiten un poco de leche después de comer, lo cual es normal y no causa molestias. Sin embargo, el vómito es diferente y puede requerir atención médica si es recurrente o abundante.
- Consejos para reducir las regurgitaciones: Alimenta a tu bebé antes de que esté demasiado hambriento para evitar que coma demasiado rápido y trague aire. Además, asegúrate de posicionar correctamente el biberón para minimizar la ingestión de aire. Cambiar la posición de tu bebé después de comer también puede ayudar a mover las burbujas de gas y reducir las regurgitaciones.
- Relájate y disfruta: No hay una edad específica en la que los bebés dejen de necesitar eructar, pero a medida que crecen, es posible que necesiten hacerlo con menos frecuencia.
- Experimenta con diferentes posiciones y encuentra lo que funcione mejor para ti y tu bebé.
Al seguir estos consejos y mantener una actitud relajada, podrás ayudar a tu bebé a sentirse más cómodo y feliz después de cada alimentación.