Consejos para impulsar el desarrollo del lenguaje en niños pequeños
Puntos Clave:
- Crea oportunidades de comunicación con tu hijo colocando objetos fuera de su alcance, fomentando la identificación de juguetes y participando en actividades que requieran interacción y lenguaje.
- Utiliza el tiempo de juego para fomentar habilidades de habla al ponerte a la altura de tu hijo, narrar el juego de simulación, incorporar instrucciones en el juego y fomentar la imitación de acciones, sonidos y palabras a un ritmo adecuado para su edad.
Estos son algunos consejos de cómo trabajar las habilidades de habla de tu hijo. Puedes consultar estas y muchas más ideas en la guía para padres de Molly: "El Manual de la Profesora de Habla". Lo escribió para compartir con los padres algunas estrategias prácticas y divertidas que pueden integrar en sus rutinas diarias.
Observar y crear interacción
Lo primero que debes hacer es observar el entorno de tu hijo. Si puede alcanzar fácilmente sus juguetes favoritos o artículos cotidianos sin pedir tu ayuda, no necesitará interactuar contigo. Comienza poco a poco colocando uno o dos objetos fuera de su alcance o dentro de un contenedor transparente que no pueda abrir solo. La idea es que vea los objetos, pero necesite tu ayuda para conseguirlos, creando así nuevas oportunidades de interacción.
Participación en el juego
Una excelente oportunidad para desarrollar el lenguaje de tu hijo es durante el juego, ya que en esos momentos está muy motivado y concentrado. Siéntate en el suelo y ponte al mismo nivel de tu hijo para jugar y hablar sobre el mundo que ha creado. Puedes narrar las escenas que están representando con frases simples, inventar diálogos o efectos de sonido, y ampliar sus expresiones. El tiempo de juego también es un buen momento para practicar seguir instrucciones. Canciones como "Somos los Dinosaurios" escrita por Laurie Berkner, o historias con sonidos como "Vamos a Cazar un Oso" de Michael Rosen son excelentes herramientas.
La jerarquía de la imitación
¡La imitación es una habilidad crucial! Enseñar a imitar es más fácil si sigues una jerarquía de habilidades. Primero están las acciones (levantar los brazos, tocarse la nariz, agitar las manos, etc.). Una vez que tu hijo sea capaz de imitar correctamente esas acciones, pasa a los sonidos. ¡Los ruidos tontos o sin sentido suelen imitarse más rápido porque son más divertidos! Después, imiten los sonidos que hacen los animales (guau guau, miau, muuu), los efectos de sonidos cotidianos (pip pip, chu chu) y las exclamaciones (oh oh, guau, ayy). Una vez que los domine, puedes empezar con palabras. Comienza con modelos de una sola palabra y aumenta gradualmente. La clave es avanzar lentamente para asegurarte de que tu hijo hace las cosas correctamente antes de pasar a una nueva etapa.
Incrementa el desafío
Los niños pequeños son muy buenos para señalar los objetos que desean y, normalmente, se los damos sin pensarlo. Sin embargo, al hacer esto, refuerzas la idea de que señalar es suficiente para obtener algo. Si quieres que tu hijo use más palabras y sonidos, deberás dar el ejemplo y animarlo a imitar lo que dices. Cuando tu hijo lo intente, incluso si no pronuncia correctamente la palabra, dale lo que pidió. Cuanto más celebres sus esfuerzos, más repetirá el ejercicio. ¡Retener un poco el objeto también funciona! No se lo des hasta que muestre algún esfuerzo o encuentre una nueva manera de pedirlo.
La paciencia es clave
Lamentablemente, los niños no aprenden a hablar de la noche a la mañana. La adquisición del lenguaje es un proceso largo y gradual. Nadie conoce mejor a tu hijo que tú, así que confía en tus instintos para saber cuándo pueden dar el siguiente paso. Es importante recordar que habrá momentos en los que el desarrollo del lenguaje se estanque. Esto se debe a que los niños aprenden a moverse y a hablar al mismo tiempo, creando el "efecto sierra" (sensación de avance y retroceso en ciertas áreas). Mientras tu hijo se concentre en un área de desarrollo, es probable que otras queden en segundo plano.
Sobre la autora invitada
Molly Dresner es una patóloga del habla y lenguaje, y terapeuta de alimentación con sede en Nueva York. Está certificada en ASHA (Asociación Americana de Habla y Audición) y entrenada en el enfoque de alimentación SOS (Sequential Oral Sensory). Recibió su Maestría en Patología del Habla y Lenguaje del Teacher’s College, Universidad de Columbia, y su Licenciatura en Ciencias del Habla y Audición de la Universidad George Washington. Actualmente trabaja con bebés y niños de hasta 5 años de edad, realizando evaluaciones y brindando terapia de habla y alimentación en Nueva York.
Fuentes: