Qué llevar contigo en el Camino de Santiago
Estás planificando tu viaje y se te plantea la duda de qué llevar contigo en el Camino de Santiago. Te damos algunos consejos de colaboradores que realizan etapas del Camino desde hace varios años.
Antes de todo
Antes de empezar a pensar sobre qué llevar contigo en el Camino de Santiago, debes hacerte las primeras preguntas que van a condicionarlo todo: cuántos días estarás caminando, la época del año, y tu estado físico general.
El número de días caminando es quizás lo que menos te va a condicionar, ya que el equipaje es o debería ser prácticamente el mismo para 5 días que para 25, aunque es verdad que si el trayecto es largo las probabilidades de cambio de clima te obligarán a llevar ropa para todo tipo de situaciones. Si vas a caminar 5 días, una vez tengas la previsión del tiempo del día anterior a la salida, las probabilidades de que el tiempo cambie son bajas, por lo que puedes aligerar bastante el equipaje.
No obstante, ten en cuenta que el norte de España es una región con clima suave, pero en general fresco y lluvioso. En verano y para etapas cortas, puedes apostar por un equipaje de verano, un chubasquero super ligero y un forro polar fino, pero en otoño o primavera, deberás llevar siempre cortavientos y forro polar más abrigado. De todos modos, por las noches siempre suele refrescar bastante, incluso hasta los 10-12 grados.
Tu estado físico general también va a condicionar tu equipaje, pues si no te sientes cómodo con la mochila a cuestas siempre puedes optar por el servicio de taxi-mochila, que podrás contratar en todas las paradas del camino (verás carteles a la salida de los pueblos).
Si tu estado físico general es bueno, te aconsejamos llevar la mochila a cuestas. Casi cualquier persona puede hacerlo sin problema y te permitirá una experiencia más completa e independiente del viaje.
¿Llevar tienda de campaña en el Camino de Santigo?
Rotundamente no. El Camino es una experiencia itinerante en la que debes ir ligero de equipaje, y la tienda añade peso, pero sobre todo las limitaciones y las incomodidades de montar y desmontar la tienda cada día (a veces a las 5 de la mañana). Todo ello no compensa en absoluto. Piensa que además no te será fácil encontrar zonas de acampada llanas y secas (en Galicia llueve muy a menudo), y los campings casi nunca están a mano.
Olvídate de la tienda y contrata albergues u hostales a la medida de tus necesidades. Si vas solo, podrás encontrar hueco en cualquier albergue, pero si viajas con un grupo, reserva con antelación (casi todos los albergues privados admiten reservas), sobre todo en verano. Si eres de los que ponen reparos a habitaciones compartidas, en todos los albergues disponen de habitaciones dobles, que podrás utilizar para uso individual por un pequeño sobrecoste.
Además los albergues te darán ocasión de relacionarte con otros caminantes y socializar, lo que viene muy bien en estos tiempos.
La mochila
A menudo, mientras caminamos, vemos a otros caminantes con mochilas super grandes y voluminosas que veces superan su propia cabeza, cargados de múltiples objetos colgantes. Y mientras nos apenamos de su situación nos preguntamos qué llevarán ahí dentro que sea tan importante …
Desde el punto de vista físico nos parece una barbaridad cargar con mochilas tan enormes. Hay que ser práctico y limitar al máximo tanto el tamaño como el peso. En primer lugar, las mochilas grandes y pesadas descompensan tu estabilidad vertical, por lo que tendrás que ir constantemente compensando el centro de gravedad con tu cuerpo, inclinándolo hacia adelante, en una postura que puede producir lesiones. En segundo lugar, un peso excesivo puede provocar daños en las vértebras y en las rodillas.
La mochila debe ir siempre bien sujeta a la espalda, sin que oscile lateralmente ni dé saltos mientras caminamos.
Casi cualquier mochila de senderismo de diseño moderno sirve para el Camino de Santiago, sin embargo siempre nos gustan las más ligeras e impermeables, es decir, las fabricadas en poliamida (evitan tener que llevar cubre-mochila pues admiten lluvia suave), con un peso nunca superior a 0.8 Kg y un tamaño máximo de 40 L para hombre y unos 30 L para mujer.
Aparte de los numerosos bolsillos para guardar pequeños objetos y cremalleras que faciliten el acceso a todas las zonas de la mochila, siempre recomendamos un buen sistema de sujeción a la espalda. Los tirantes acolchados sin costuras y cinchas horizontales a la altura del pecho y de la zona lumbar son imprescindibles. Estos fijan el bulto a tu espalda de forma óptima y los acolchamientos evitan las rozaduras en las ante-axilas. Te explicamos como sujetarla correctamente.

Algunas mochilas llevan una rejilla de ventilación que está en contacto con la espalda, así reducirás la sudoración y las terribles rozaduras.

El peso de la mochila en el Camino de Santiago
El peso de la mochila es quizás de las cosas más importantes a tener en cuenta al preparar tu viaje. Aquí el consenso es casi general: el peso deberá ser como máximo entre un 8% y un 10% de tu peso. Es decir, si pesas 70 kg. la mochila no debe pesar más de 7 Kg., incluido el peso de la propia mochila. Piensa que además llevas ropa puesta y lo normal es que lleves una botella de agua pequeña (añade 0,5 Kg), algo de fruta y barritas energéticas (añade 0,5 Kg). El 10% de tu peso te parecerá muy poco, y verdaderamente lo es, pero puedes y debes hacerlo, pues cuando lleves 5 etapas y 100 Km en tus pies, lo agradecerás.
Por lo reducido del peso, ahora entenderás porqué es tan importante pensar bien qué llevar contigo en el Camino de Santiago y qué dejar en casa.
Riñonera
Sobre este accesorio no hay consenso. Mientras algunas personas se encuentran cómodas llevando en la riñonera los objetos personales de uso más cotidiano, a otras no les gusta nada.
En cualquier caso, si eres de los que les gusta llevar riñonera, te aconsejamos un modelo con diseño extraplano, para llevar a mano las pertenencias esenciales, como carnés, tarjetas de crédito, dinero, y alguna cosa más que tener a mano como crema solar, las gafas de sol, etc.
Nunca lo cargues demasiado, ni acarrees objetos voluminosos, pues comenzará a molestarte a los pocos kilómetros de caminar.

Ropa de frío, calor, lluvia y baño
La mayor parte del equipaje que acarrees es ropa, por eso es importante elegir bien qué llevar. Te explicamos qué tipo de ropa llevamos nosotros y cómo nos arreglamos con tan poca. En verdad no hay ningún secreto: deberás reutilizar la ropa lo máximo posible, lavándola o utilizándola varios días. Las prendas multifuncionales son ideales para el camino.
Te aconsejamos que toda la ropa que lleves, la estrenes con bastante antelación y que la pruebes en caminatas previas de algunas horas. De este modo te asegurarás de que no te producen rozaduras, vas cómodo con ellas, etc.
¿Es posible lavar la ropa en el Camino de Santiago?
Sí, aunque como estarás en albergues siempre de paso, no es sencillo. Todos los albergues disponen de zona de lavado de ropa y secado, normalmente al exterior. El problema es que cuando te pongas a lavar y tender la ropa serán las 5 de la tarde, por lo que ese mismo día la ropa no se secará y deberás dejarla toda la noche tendida, pero al ser un clima muy húmedo, a la mañana siguiente tampoco se habrá secado, debiendo llevarla contigo húmeda.
En ocasiones, la ropa húmeda la llevamos colgando en la mochila y durante la caminata se suele secar sin problema, y en todo caso, la puedes tender en el siguiente albergue.
Por eso, te recomendamos ropa técnica de senderismo, pues es muy ligera y seca muy rápidamente. Este tipo de ropa técnica es totalmente aconsejable.
Ropa interior
Para mujeres aconsejamos llevar sujetadores deportivos y varios pantaloncitos tipo culotte, sin costuras o seamless. Con ellos te protegerás de las molestas rozaduras que pueden hacer de tu camino un verdadero calvario. Para una semana de viaje, puedes llevar dos sujetadores y tres pantaloncitos.
Para hombres aconsejamos llevar pantaloncitos tipo boxer de al menos 10 cm de pierna, y sin costuras. Para una semana, con tres unidades te arreglarás bien.
Pantalón corto, pantalón largo
Sin duda deberás llevar ambos. Una opción interesante es llevar pantalones técnicos mixtos con cremallera. Podrás reducir peso y son de un tejido muy resistente a rozaduras.
Algunas personas, especialmente mujeres, optan por llevar pantalones tipo leggin de grosor adecuado al a época del año. Son muy cómodos, evitan rozaduras y si son de buena calidad además tendrás el plus de que ejercen una compresión controlada sobre tus piernas, facilitando el drenaje linfático.
Para una semana, con llevar dos pantalones cortos y unos largos es suficiente.
Camisetas cortas y largas
Es la base de tu vestimenta. Procura elegir camisetas técnicas, por su bajo peso y por su rápido secado, pero también puedes llevar camisetas de algodón fino. En tu armario seguro que tienes varias camisetas de publicidad fabricadas con un fino algodón. Estas son las mejores.
Procura también llevar una camiseta de manga larga, pues te sacará de algún apurillo en días frescos, para dormir, etc.
Par una semana lleva tres camisetas de manga corta y una de manga larga.
Cortavientos, cazadora, forro polar
En primavera y verano, te aconsejamos que lleves una única prenda de abrigo exterior. Un cortavientos de calidad con un fino forro interior y ligero te servirá sin problema. La temperatura de las mañanas y noches de verano suele estar en torno a los 12-14 grados.
En otoño e invierno, lleva además un forro polar más grueso, pues en las mañanas y las noches la temperatura llega a caer hasta los 3-5 grados.
Y ¿qué llevo para la lluvia en el Camino de Santiago?
Nosotros optamos por llevar lo más ligero que existe: un simple poncho de plástico de los que te regalan en los autobuses turísticos en verano (unos 100 gr) y un poncho de mejor calidad para otoño e invierno (200 gr). Te cubrirá también la mochila y las piernas.
Casi al 100%, te lloverá durante el Camino de Santiago. En verano, aparte de alguna tormenta puntual, las lluvias suelen ser suaves, pero en invierno suelen ser más abundantes. De todos modos, al tema de qué llevar para la lluvia no le des muchas vueltas: cuando llueve, el camino se hace pesado e incómodo y siempre acabarás algo mojado o mojada.
El calzado y los calcetines
Elegir bien el calzado es muy importante, porque debe servirte para todo tiempo y todo tipo de senderos, y no para escalar montañas. Nosotros siempre elegimos calzado deportivo de mucha calidad, bien zapatilla deportiva con plantilla de gel, bien bota de caña corta o media de marca. En cualquier caso, el calzado debe estar preparado para el agua (lluvia, charcos). Los tejidos técnicos del tipo Goretex encarecen bastante el calzado, pero son casi imprescindibles para este tipo de travesías.
En general el Camino discurre por senderos de tierra bien acondicionados, por lo que casi cualquier tipo de calzado deportivo de buena calidad cumple con esta función.
Repetimos el consejo que habrás ya escuchado hasta la saciedad: estrena el calzado del Camino con mucha antelación; hazle al menos 100 Km antes de iniciar el Camino para «domesticarlos» y asegurarte de que te sientan como un guante y no te hacen rozaduras.
En este otro artículo te explicamos cómo cuidar de tus pies en el Camino de Santiago.
En cuanto a los calcetines, no lo dudes: llévalos sin costuras, de compresión suave y de la mejor calidad posible. Tres pares para una semana es suficiente.
Y para dormir en el Camino: ¿llevo saco de dormir?
Dormir bien es fundamental. Por ello lo primero que debes plantearte es si llevar saco de dormir o no. Nosotros últimamente hemos optado por no llevar saco y te explicamos porqué.
Todos los albergues disponen de ropa de cama de bastante buena calidad, y siempre disponen de mantas y edredones. Por cierto, pídelas siempre porque a veces si no las pides, te quedas sin ellas. Sin embargo por el Covid, muchos albergues están optando por proporcionar sábanas de papel desechables. La verdad es que este sistema no nos gusta demasiado, así que nuestra solución consiste en llevar una sábana bajera individual (100 gr.) y una sábana de tamaño niño (50 gr.). Entre las dos suman unos 150 gr, pero a nosotros nos merece la pena la comodidad que proporciona la sensación de dormir casi como en tu propia cama. En tu armario, seguro que tendrás ropa de cama antigua que podrás rescatar para ese caso. Además, las sábanas siempre podrán servirte para como mantel, hacer un picnic improvisado, etc.
Es verdad que hay sacos de dormir de muy poco peso y muy buenos, pero los verdaderamente buenos y poco voluminosos son muy caros. Es por ello que hemos optado por el sistema anterior, sencillo y multifuncional.
En cuanto a la ropa de dormir te aconsejamos que utilices la camiseta de manga larga y un pantalón corto limpio, de los que utilizas para caminar. Por la noche no vas a sudar, por lo que podrás utilizar estas mismas prendas al día siguiente.
Bastones de senderismo en el Camino de Santiago: ¿llevarlos o no llevarlos?
Tras varios años haciendo el Camino, nuestra consejo es que sí merece la pena llevarlos, pero siempre la pareja completa. Los bastones de senderismo de diseño moderno pesan apenas 250 gr, son adaptables en altura y son plegables. Además son super baratos. Puedes encontrarlos en cualquier tienda deportiva por menos de 25 €.
Pero su verdadero plus es la estabilidad que te proporcionan y el ritmo constante en la caminata al realizar el paso acompasado de sendos bastones.
Los bastones de senderismo aportan una gran estabilidad, un mejor ritmo de la marcha (reduciendo el cansancio), y reduce el riesgo de caídas y resbalones pues nos proporcionan dos puntos de apoyo adicionales. La mayoría de los modelos traen puntas intercambiables para tierra o asfalto, que tambi´ñen merece la pena llevar.
Otros accesorios
Aquí te dejamos algunos accesorios que nosotros siempre llevamos a cuestas y que creemos que son importantes:
- Botella de agua: de las de plástico de medio litro; no te compliques con botellas o cantimploras metálicas, pesan demasiado y no podrás deshacerte de ellas cuando lo necesites.
- Cuerda de nylon fina, unos 5 m: te servirá como tendal de ropa, para arreglar la hebilla de una mochila, etc.
- Navaja multiusos: de las de Victorinox, siempre con tijeras; te sacarán de apuros, seguro.
- Vaselina: no escatimes en esto; úsala constantemente en pies, ingles y axilas, tal y cómo te explicamos aquí.
- Paracetamol e Ibuprofeno: sin ánimo de automedicarnos, tomar un ibuprofeno de 600 gr antes de acostarte te ayudará a reducir los dolores musculares y de las articulaciones propios de este tipo de actividades
- Antiácido: las comidas en el norte de España son muy abundantes y contundentes; si eres de los de estómago delicado, lleva antiácidos.
- Linterna de frente: sobre todo en otoño e invierno, donde los días son cortos. Algunos díass tendrás que madrugar y salir temprano, aún sin salir el sol.
- Bridas de plástico: un par de bridas no pesan nada y te pueden resolver el atar los bastones, una hebilla rota de la mochila, etc.
- Mascarillas: no olvides llevar algunas mascarillas anticovid contigo.
- Bolsa para ropa limpia: a medida que vayas haciendo etapas, te resultará conveniente proteger la ropa limpia del esto de ropa y objetos; una simple bolsa estanca de plástico de congelar alimentos es perfecta para este fin
- Toalla de microfibra: lleva una de tamaño mediano y de buena calidad
- Chanclas: de las goma, de las más sencillas y ligeras que encuentres. No querrás ducharte descalzo o descalza.
- Bañador: lleva bañador, pues te servirá para darte algún que otro chapuzón en la playa, piscinas en los albergues y para ducharte en duchas compartidas
- Jabón, gel de ducha y champú: lleva un único botecito de gel con la cantidad justa para los días de caminata
- Protección frente al sol: crema solar con protección 50, para cuerpo y cara, gafas de sol y sombrero o gorra de visera son imprescindibles, pues estarás todo el día al aire libre y debes protegerte.
- Cepillo de dientes y pasta de dientes en envase pequeño.
Qué llevar al Camino de Santiago para una semana
Por último te dejamos aquí una tabla resumen o checklist de qué llevar al Camino para una travesía de una semana en Otoño o Primavera.
Esto es lo que nosotros llevamos.
Objeto | Cantidad | Peso aprox. |
Mochila | 30-40 l. | 1 kg |
Riñonera | 1 | 100 gr |
Ropa interior | Hombre: 3 boxer largos Mujer: 3 culotte largos y 2 sujetador deportivo | 150 gr |
Pantalón corto | 2 | 200 gr |
Pantalón largo | 1 | 250 gr |
Camiseta corta | 3 | 300 gr |
Camiseta larga | 1 | 150 gr |
Poncho de lluvia | 1 | 75 gr |
Cortavientos | 1 | 450 gr |
Forro polar fino | 1 | 250 gr |
Botas caña corta | 1 | 400 gr |
Calcetines | 3 | 75 gr |
Ropa de cama | 1 funda almohada 1 bajera 1 sábana | 500 gr |
Bastones | 2 | 275 gr |
Botella agua | 1 | 500 gr |
Cuerda nylon | 5 m | 10 gr |
Navaja multiusos | 1 | 100 gr |
Vaselina | 1 tarro | 150 gr |
Paracetamol | 7 unidades | 5 gr |
Ibuprofeno | 7 unidades | 5 gr |
Antiácido | 7 unidades | 5 gr |
Crema antirozaduras | 1 | 10 gr |
Linterna frontal | 1 | 50 gr |
Bridas | 2 | 5 gr |
Mascarillas | 7 | 25 gr |
Bolsa ropa limpia | 1 | 5 gr |
Toalla microfibra mediana | 1 | 300 gr |
Chanclas goma | 1 | 50 gr |
Bañador | 1 | 150 gr |
Jabón | 150 ml | 150 gr |
Crema solar | 150 ml | 150 gr |
Sombrero/gorra | 1 | 50 gr |
Gafas de sol | 1 | 50 gr |
Cepillo y crema dental | 1 | 30 gr |
Otros objetos: llaves, tarjetas, … | — | 150 gr |
PESO TOTAL DE LOS OBJETOS | 6,2o Kg | |
PESO TOTAL DE LA MOCHILA + OBJETOS | 5,20 Kg |
El peso total incluye la vestimenta que llevarás puesta durante la caminata, por lo que para conocer el peso total de la mochila, al peso de ésta deberás descontarle el peso de dicha vestimenta y el de los bastones. Estos valores lógicamente pueden oscilar un 15% en función de si las prendas son de hombre o mujer, tu talla, el tejido, etc.
Ante la duda de qué llevar en Camino de Santiago, guíate siempre por la función de los objetos y su peso. Como puedes ver, puedes llevar una mochila de entre 5 y 6 Kg sin problema, y así ir ligero de equipaje en el Camino de Santiago.
Y…¡A disfrutar del camino!
